La iniciativa busca ofrecer una alternativa segura y ambientalmente adecuada para desechar este tipo de residuos peligrosos, los cuales no pueden disponerse junto a los residuos domiciliarios ni en campañas de cachureos.
Las baterías contienen plomo y ácido sulfúrico, sustancias altamente contaminantes que, al ser mal gestionadas, pueden afectar el suelo, las aguas subterráneas y representar un riesgo directo para la salud de las personas.
El alcalde Claudio Radonich indicó que el objetivo es evitar que estos residuos terminen en lugares no autorizados.
La jornada fue autorizada por la seremi de Salud, y se ejecutó con apoyo de las empresas Servimer, encargada del acopio seguro en terreno, y Recimat que realiza el transporte y valorización final.
Noticia de : La Prensa Austral